Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies. Más información

Aceptar

Somos la Academia con más experiencia de España, el legado de un gran Maestro y más de 10.000 alumnos nos avalan

La Academia con más experiencia de España, enseñando desde 1995

Pioneros en Danza Oriental

Reportajes de prensa de Yasmina Andrawis y la Academia Danza Oriental El Karnak en revista Cuerpo Sano
Reportajes de prensa de Yasmina Andrawis y la Academia Danza Oriental El Karnak en revista Cuerpo Sano
Reportajes de prensa de Yasmina Andrawis y la Academia Danza Oriental El Karnak en revista Cuerpo Sano

El Karnak nos recomienda - Baila la Danza del Vientre en la Revista Cuerpo..

[Publicado en Nº 57]
Techi León de la Academia de Danza Oriental El Karnak, colabora y asesora en este artículo acerca de la Danza del vientre, desde nuestro punto de vista y concepción como también se cuenta en el libro de lectura recomendada, La Danza del vientre un Himno a la Vida. Artículo publicado en la revista Cuerpo de Mujer, distribuida en España, Marruecos, U.K., Portugal, Italia y Austria.

Transcripción del artículo

Hakim junto Yasmina Andrawis

Moldea el cuerpo y ayuda a liberarte de tensiones

Pensada por y para mujeres, la danza mas antigua del mundoalivia los dolores menstruales, facilita el parto, y mejora las relaciones sexuales. ¡Aprende a bailarla!

Estás decidida: este año tienes que hacer ejercicio y encontrar unas horas a la semana para cuidar tu cuerpo relajar tu mente. El caso es que el aerobic no te convence, el gimnasio te aburre y la piscina en invierno... ¿Por qué no pruebas la danza del vientre? Aunque en principio te suene demasiado exótico, si te decides practicarás un excelente ejercicio en el que se implica todo el cuerpo y también la mente. Exclusivamente femenina, la danza oriental desbloquea tensiones y aumenta la autoestima. Muslos, pantorrillas y brazos se endurecen y estilizan, y abdomen y cintura se moldean gracias al constante movimiento. En qué consiste Aunque por su nombre creas que es el vientre lo que principalmente moverás, en la danza oriental se trabaja todo el cuerpo. “Se mueve todo en una disociación armónica. Desde la punta de los pies hasta el pelo. Piernas, brazos, manos, espalda, cuello, pelvis, cabeza. Todo baila”, explica Techi León, directora de la academia de danza oriental El Karnak y autora del libro La danza del vientre, un himno a la vida. Una característica de este baile, que es en gran parte lo que le confiere su aire mágico, es que los movimientos se ejecutan de forma disociada, de tal manera que, si mueves la cabeza, el resto del cuerpo permanece quieto. La pelvis se aísla y con ella se trazan figuras circulares. Los brazos, siempre en alto, realizan movimientos suaves y constantes. El rostro y, en concreto la mirada, se llena de expresividad. Es un baile diseñado para el cuerpo femenino, con un énfasis especial en los músculos abdominales y en los movimientos de pecho y caderas, Sus movimientos son suaves y fluidos, pero complejos al mismo tiempo. En algunos momentos la bailarina alcanza un intenso grado de concentración que se subraya con el sonido de ciertos instrumentos musicales de percusión. Asociada, en gran parte por la influencia de las películas norteamericanas, a la seducción y el erotismo, la danza del vientre es sensual, pero no pretende ser un instrumento de seducción ni de ofrecimiento al hombre. “Es una danza elegante, misteriosa y sensual que no tiene nada que ver con el erotismo vulgar. La mujer tiene que bailar como una reina, no como una esclava del sexo -aclara Techi León-. Por el contrario, la práctica de la danza oriental otorga sentido de la dignidad a la mujer y consigue que se auto afirme se sienta bien con ella misma".

Yasmina Andarwis

Beneficios muy femeninos

El movimiento de la pelvis resulta muy beneficioso para aliviar los dolores menstruales, los síntomas de la menopausia o el estreñimiento. También facilita el trabajo del parto y combate los problemas de frigidez. Con esta danza se mueven todos los centros energéticos del cuerpo favoreciendo el funcionamiento de las articulaciones. Mejora la circulación sanguínea, el sistema linfático las secreciones hormonales en general. El baile en su conjunto aporta una mayor elasticidad y relax físico en hombros, espalda, muñecas y caderas, además de desbloquear la tensión en la zona de la pelvis. Muslos, pantorrillas y brazos se estilizan, y el abdomen y la cintura se moldean. Pero no sólo el cuerpo se beneficia, también la mente se ve afectada de forma positiva por la danza. La mujer, al entrar en contacto con su cuerpo, consigue un desbloqueo psicológico que le permite aceptarse tal como es, aumenta su autoestima y vence miedos e inhibiciones. Otro logro mental es el aumento de la capacidad de concentración, pues al realizarse movimientos disociados la mente ha de estar muy atenta y activa mientras se baila. Si el cuerpo adquiere flexibilidad y fortaleza muscular, coordinación y equilibrio, el cerebro está despierto y la persona se siente segura. Sin embargo, esta danza no es el remedio a todos los males ni puede suplir, en los casos necesarios, la ayuda de un profesional. “No queremos crear falsas expectativas. Es cierto que se obtienen numerosos beneficios, pero son individuales y será la propia mujer la que los descubra. Aquí acuden las mujeres que quieren aprender a bailar. Los beneficios que recibe cada una de ellas son personales. No pretendemos sustituir al médico ni al psicólogo”, matiza la directora de El Karnak.

¿Es difícil de bailar?

Para aprender la danza oriental no se necesitan conocimientos previos de baile ni tampoco una forma física especial. La fisonomía del cuerpo tampoco es importante pueden bailarla tanto las delgadas como las gorditas ni la edad. El único requisito es ser mujer y, por supuesto, tener ganas de aprender, Pero esto no quiere decir que no haga falta conocer la técnica o que baste con cerrar los ojos y dejarse llevar por la música. Al revés, los ojos deben estar bien abiertos. Como cuenta Techi León, son dos los enemigos de esta danza: “la ansiedad, o el quererlo todo rápido, y el creer que ya se sabe todo. Hay que tener en cuenta que se trata de una danza muy elaborada. Hay que creer en las posibilidades de aprendizaje del cuerpo, darse permiso y abrir la mente para captar sensaciones, emociones y experiencias. Todo ello sin olvidar la técnica, porque, aunque es un baile muy espiritual que delata el contenido interior de cada mujer, no hay que olvidar que el cuerpo es la herramienta del espíritu”. Con ocho meses de entrenamiento dos veces por semana se puedo legar a bailar muy bien.
Este baile está contraindicado en los casos en que existan lesiones previas de la espalda tanto en la zona cervical como en la lumbar. “Aconsejamos, si hay dudas, que se acuda antes al médico y que sea él quien dé el visto bueno”.

Reportajes de prensa de Yasmina Andrawis y la Academia Danza Oriental El Karnak en revista Cuerpo Sano
Reportajes de prensa de Yasmina Andrawis y la Academia Danza Oriental El Karnak en revista Cuerpo Sano

Un baile de sacerdotisas y mujeres comunes

La danza oriental, conocida en Occidente como danza del vientre, es considerada una de las más antiguas del mundo. Aunque de orígenes inciertos, la versión más aceptada dice que la danza tuvo su origen en el antiguo Egipto. Entonces el vientre femenino era sagrado porque guardaba la vida y la mujer tenía el poder de la perpetuación de la especie, En honor las diosas de la fertilidad, las sacerdotisas bailaban en rituales con movimientos ondulatorios, rítmicos y circulares del vientre. Las sucesivas invasiones de Egipto por parte de romanos, griegos, turcos y marroquíes supusieron una gran influencia cultural que también afectó a la danza. Con el paso del tiempo, estos bailes rituales pasaron al pueblo y fueron los árabes los que se encargaron de difundirla por todo el mundo después de incorporarla a su cultura. Los países árabes donde más se han desarrollado son Egipto, Líbano y Turquía, aunque también se practican en bastantes países europeos y en Estados Unidos. Pese a que suele asociarse con la imagen de bailarinas de harén cargadas de seducción, ésta es una danza que bailan prácticamente todas las mujeres árabes como parte de sus vidas cotidianas. Aprenden de pequeñas en fiestas y reuniones familiares, si bien a causa de las restricciones que impone la sociedad tradicional musulmana, las mujeres no suelen bailar en público ni dedicarse a la danza de forma profesional. Pero no por ello han dejado de bailar. Danzan antes del parto, en las fiestas de bodas o, simplemente, para relajarse y divertirse entre ellas y olvidar durante un rato sus problemas.


El Karnak es el Centro Especializado en Danza Oriental mas Veterano de España - 25 años de experiencia Impartiendo Clases de Danza del Vientre, en Madrid, Danza Oriental - Más de 10.000 Alumnas nos Avalan - Bajo la Dirección de Yasmina Andrawis.

Contacta

  1. +34 915 219 354
  2. +34 607 413 830
Copyright © El Karnak Danza Oriental - Clases de danza del vientre en Madrid - C/ Libertad 7 - Aviso Legal - Politica Cookies - Privacidad