Hoy os quiero comentar que la Danza del Vientre es curiosamente misteriosa, es una danza con la que tienes que conectar con tu interior, son varios los factores que vas percibiendo a medida que vas recibiendo las clases, estos son los beneficios que te puedes encontrar:
La Danza del Vientre y el silencio mental.
Es difícil acallar la mente, está muy activa día a día por los estímulos de la tv, por la preocupación de hacer bien el trabajo, de acordarnos de todo lo que hay que preparar en casa… todo eso hace que estemos mentalmente en un 100% de actividad mental mas el estrés que se va acumulando.
Llegar a clase de danza oriental y durante una hora no acordarse de los problemas ¡es un placer!, es un descanso, como si nos diésemos cuenta que estábamos congestionados y recién podemos respirar. Eso no tiene precio.
La Danza del Vientre te ayuda con la conexión cuerpo-mente-emoción.
Conseguir conectar, mente-cuerpo-emoción ya nos llevara más tiempo, es una dedicación a una misma para sentirse bien con una misma en lugar de sentir que la vida te zarandea a donde ella quiere. A medida que bailar vas notando esos pequeños matices a mejor que te reconfortaran y te harán tener una perspectiva diferente de la vida. Tú te conviertes en tu propio eje y la vida interactúa contigo.
La Danza del Vientre y la perseverancia.
La constancia para conseguir tus metas es fundamental, cada día hay que practicar un poco de movimientos de danza oriental, acuérdate que no son movimientos habituales en nuestro cuerpo, por lo que hay que dedicarse un rato a una misma para entender cómo se mueve su propio cuerpo
Tus logros te acercan a la meta.
Si tú no te felicitas por tus pequeños logros sea en danza oriental o en tus progresos en tus proyectos no lo hará nadie, así que acuérdate de ti y de que cada día haces avances para conseguir tus objetivos.
La Danza del Vientre y la aceptación.
En la danza oriental no hay un prototipo de físico perfecto, no tiene prefijado una edad, ni una talla de ropa, ni la altura, no hace falta elasticidad…. Simplemente disfrutar bailando con una misma, redescubriéndose, aceptándose como es y recorriendo el camino de la danza oriental hacia un nuevo parámetro emocional.
La Danza del Vientre y la disociación.
La danza oriental tiene muchos niveles, cuello, pelo, los brazos, el torso, las caderas, el equilibrio, coordinar todo además de la lateralidad derecha e izquierda que tampoco van simétricos hace que esta danza sea muy completa.
Desarrolla tu lado positivo.
De pequeñas siempre nos preguntan ¿Qué quieres ser de mayor? Pues yo quiero ser positiva. No quiero que el día este lleno de recuerdo tristes o de comentarios despectivos hacia mi persona así que cada vez que puedo me digo frases positivas y recuerdo mis logros conseguidos:
- comprendo un nuevo movimiento,
- cada vez estoy mejorando un movimiento,
- cada vez comprendo mejor como se mueve mi cuerpo
- cada vez bailo mejor,
- estoy progresando con la danza oriental…
Los avances son diferentes en cada una.
Cada una avanza a un ritmo diferente así que no se puede comparar si unas aparentemente aprenden más rápido o no. Y tampoco queramos ser como los demás, en la academia el Karnak no fomento esa idea, cada una es como es, en esencia cada una es bella como es, cada una tiene su movimiento porque su cuerpo es así. Si tratamos de lograr lo que nuestro cuerpo no puede nos frustraremos. Por eso hay que aceptarse como es y aprender cómo se mueve su cuerpo.
Cada coreografía te llevara a un aspecto diferente de ti, recuerda que este es un arte vivo porque vive dentro de ti y tu eres ese arte fluyendo cada día. Crea armonía en tus movimientos y con los que te rodean.
Feliz día.
Si eres nueva en este ámbito y deseas explorar el fascinante mundo del arte en movimiento que contiene la Danza del Vientre, te animo a visitar la página web, consultar los horarios y seguir nuestras redes sociales.